Los helechos, incluidos el Helecho de Boston y otros, contribuyen a la purificación del aire al absorber dióxido de carbono y liberar oxígeno durante la fotosíntesis.
Los helechos liberan vapor de agua a través de un proceso conocido como transpiración, lo que aumenta la humedad del aire en su entorno. Esto puede ser beneficioso en interiores, especialmente en climas secos.